BENDICIÓN DE TODAS LAS COSAS

I

C. Oremos. Oh Dios, que con tu palabra todo lo santificas, bendice este objeto, y por la invocación de tu Santísimo Nombre concede la salud del cuerpo y la protección del alma, a cuantos usen de él, con ánimo agradecido, conforme a tus mandamientos y a tu Voluntad. Por Cristo Nuestro Señor.

R. Amén.


C. La bendición de Dios Omnipotente, del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, descienda sobre vosotros y permanezca para siempre.

R. Amén.

BENDICIÓN DEL AGUA

I

C. Señor, Dios Todopoderoso, que eres la fuente y el principio de la vida del cuerpo y del espíritu, dígnate bendecir + esta agua que vamos a utilizar con fe para implorar el perdón de nuestros pecados y para alcanzar la protección de tu gracia contra todas las enfermedades y asechanzas del enemigo. Concédenos, Señor, por medio de tu misericordia, que el agua viva nos sirva siempre de salvación, para que podamos acercarnos a Ti con un corazón limpio y evitemos todo mal del alma y del cuerpo. Por Jesucristo nuestro Señor.

R. Amén.

II

Señor, Padre Santo, Dirige tu mirada sobre nosotros, que redimidos por tu Hijo, hemos nacido de nuevo del agua y del Espíritu Santo en la fuente bautismal; concédenos, te pedimos, que todos los que reciban la aspersión de esta agua queden renovados en el cuerpo y en el alma y te sirvan con limpieza de vida. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

BENDICIÓN DE UNA IMAGEN

I

C. Dios todopoderoso y eterno, Tu permites esculpir o pintar imágenes de tus Santos, a fin de que, al contemplarlas, meditemos y tratemos de imitar sus obras y sus virtudes. Por eso te pedimos que bendigas + y santifiques esta imagen, hecha en honor y recuerdo de... (Ntro.. Señor Jesucristo, La Sma. Virgen María, San...).

Te rogamos que a quienes procuren, delante de esta imagen, tributar culto y honrar a ... , por sus méritos e intersección les concedas tu gracia en este mundo y la gloria eterna en la vida futura. Por Cristo nuestro Señor.

R. Amén.

II

De Jesucristo:

C. Oh Dios, tú habitas en una luz inaccesible y nos has amado tanto que, siendo invisible, te nos has hecho visible en Cristo; mira con bondad a estos hijos tuyos, que han dado forma a esta imagen de tu Hijo, y haz que al venerarla, se vayan transformando en la realidad que esta imagen representa. Por Jesucristo nuestro Señor.

R. Amén

III

De la Virgen

C. Oh Dios, que en la Santísima Virgen has dado a tu Iglesia una imagen de la gloria futura a la que esperan llegar tus fieles, que han elaborado esta imagen de la Santa María, alcen confiadamente sus ojos hacia ella que resplandece como modelo de virtudes para todo el pueblo de tus elegidos. Por Jesucristo nuestro Señor.

R. Amén.

IV

De los Santos

C. Oh Dios, fuente de toda gracia y santidad, míranos con bondad a nosotros tus servidores, que hemos dispuesto esta imagen de San N. , y haz que experimentemos la intersección de este santo, el cual convertido en amigo y coheredero de Cristo, resplandece como testigo de vida evangélica y como egregio intercesor ante ti. Por Jesucristo nuestro Señor.

R. Amén.

BENDICIÓN DE OBJETOS DE PIEDAD Y ROSARIOS.

C. El Señor, con su bendición +, se digne aumentar y fortalecer tus sentimientos de piedad y devoción, para que transcurras sin tropiezo tu vida presente y alcances felizmente la eterna. Por Jesucristo nuestro Señor.

R. Amén.

Rosario:

C. En memoria de los misterios de la vida, muerte y resurrección de nuestro Señor, para honra de la Virgen María, Madre de Cristo y de la Iglesia, sea bendecida la persona que ore devotamente con este rosario: en el nombre del Padre + y del Hijo y del Espíritu Santo.

R. Amén.

BENDICIÓN E IMPOSICIÓN DEL ESCAPULARIO.

C. Oremos: Señor nuestro Jesucristo, Salvador del género humano, santifica + este hábito que tu siervo/a ha resuelto llevar por amor a Tí y a tu Santísima Madre, la Virgen María del Monte Carmelo. Que por la intercesión de esta misma Señora sea defendido de los ataques del enemigo y persevere en tu gracia hasta la muerte. Tú que vives y reina por los siglos de los siglos.

R. Amén.

Y asperge el hábito con agua bendita.

Padre nuestro.

Lo impone a cada persona diciendo:

-Recibe este hábito bendito, suplicándole a la Santísima Virgen que, por sus méritos, puedas llevarlo sin mancha, te defienda de toda adversidad y te conduzca a la vida eterna.
R. Amén.

Luego continúa en general:

-Yo con el poder que me ha sido concedido, te hago partícipe de todos los bienes espirituales que, con la cooperación de la misericordia de Jesucristo nuestro Señor, propagan los religiosos del monte Carmelo. En el nombre del Padre +, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
R. Amén.

- Dios todopoderoso, creador del cielo y de la tierra, te bendiga +, ya que se ha dignado agregarte a la confraternidad de la Santísima Virgen del Monte Carmelo. Y a ella le pedimos que, en la hora de tu muerte, aplaste la cabeza de la serpiente infernal, y que logres al fin conseguir la palma y corona de la herencia sempiterna. Por nuestro Señor Jesucristo.
R. Amén.

BENDICIÓN DE LAS VELAS
(en el día de S. Blas - 3 de febrero)

- El Señor esté con vosotros.
R. Y con tu espíritu.

- Dios que en todas partes manifiesta su poder y su bondad, encomienda a la Iglesia la bendición de determinados elementos, para que todos los que los usen piadosamente se sientan atraídos hacia los bienes invisibles y bendigan a Dios, que es también admirable en sus santos.

- Oremos: Dios todopoderoso, que creaste la diversidad de las cosas del mundo, y quisiste que tu mismo Hijo se encarnara para la Redención. Tú que eres grande e inmenso, digno de toda alabanza, haces cosas admirables. Para confesar su fe en ti el glorioso Obispo y mártir S. Blas, no temiendo los tormentos, consiguió felizmente la palma del martirio. Entre otras gracias tú le diste esta prerrogativa: que por tu poder curara el mal de la garganta.

Te rogamos humildemente que no mires nuestras culpas, y por los ruegos y méritos de S. Blas, bendice + y santifica por tu admirable piedad estas candelas infundiéndoles tu gracia, a fin de que todos aquellos a quienes les fueren aplicadas en la garganta, se vean libres de cualquier mal de la misma, y alegres y sanos te rindan en la Iglesia acciones de gracias y alaben tu glorioso nombre que es bendito por los siglos. Por Jesucristo nuestro Señor.

R. Amén

Y rocía las velas con agua bendita.


Luego las aplica (sin encenderlas) a la garganta de cada uno de los fieles mientras dice:

Por la intercesión de S. Blas, obispo y mártir, te libre de todo mal de la garganta y de cualquier otro mal.
R. Amén.

Conclusión del rito:

- El Señor tenga en cuenta vuestra devoción y os conceda su ayuda en cada momento de la vida.
R. Amén.

- Que con su amor os guíe y proteja aquí en la tierra y os haga llegar felizmente a la gloria celestial.
R. Amén.

-Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo, descienda sobre vosotros y permanezca para siempre.
R. Amén.

 

BENDICIÓN DE LOS ANILLOS EN LA PROMESA MATRIMONIAL.

-Oremos: Señor, Creador y conservador del género humano, que das la gracia sobrenatural y la eterna salvación, haz descender tu bendición + sobre estos anillos para que quienes los lleven en sus manos como signo de mutua fidelidad, adelanten todos los días en el camino de su salvación, defendidos con tu celestial protección. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

BENDICIÓN DE UNA FAMILIA EN SU CASA.

Bendito seas, Dios, Padre nuestro, por esta casa, destinada por tu bondad a que viva en ella esta familia. Haz que sus habitantes reciban los dones de tu Espíritu y que el don de tu bendición + se haga presente en ellos por su caridad, de manera que todos los que frecuenten esta casa encuentren siempre en ella aquel amor y aquella paz que sólo tú puedes dar. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

BENDICIÓN DE UNA CASA

I

- A Ti, Dios, Padre Omnipotente, humildemente dirigimos nuestras súplicas en favor de esta casa, de todos los que en ella moran y de todo cuanto hay en ella. Dígnate bendecirla +, santificarla y enriquecerla con toda clase de bienes. Concede a sus moradores una copiosa bendición celestial; que de la riqueza de la tierra puedan sacar su subsistencia, y por tu misericordia les permitas llegar a la satisfacción de sus legítimos deseos.

Señor, con mi entrada a esta casa, haz que entren juntamente la bendición y la santificación, como bendijiste las casas de Abraham, Isaac y Jacob. Los Angeles que te asistieron en los esplendores de tu gloria habiten aquí y protejan a todos sus moradores y visitantes. Por Cristo nuestro Señor.
R. Amén

II

Nueva Casa

Asiste Señor a esos servidores tuyos, que al inaugurar (hoy) esta vivienda imploran humildemente tu bendición, para que cuando vivan en ella sientan tu presencia protectora, cuando salgan gocen de tu compañía, cuando regresen experimenten la alegría de tenerte como huésped, hasta que lleguen felizmente a la estancia preparada para ellos en la casa de tu Padre. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
R. Amén.

Rocía con agua bendita

Que Dios colme vuestra fe de alegría y de paz. Que la paz de Cristo actúe de arbitro en vuestro corazón. Que el Espíritu Santo derrame en vosotros sus dones.
R. Amén.

BENDICIÓN DE LOCALES Y LUGARES DE TRABAJO

- Oremos: Oh Dios, de quien procede la plenitud de la bendición, y hacia quien sube la oración del que te bendice, bendice + este lugar/local, destinado a ... Protege con amor a tus siervos, que confiadamente presentan ante Ti su trabajo. Concédeles que con espíritu de oración y actividad infatigable colaboren en el perfeccionamiento de la creación, ganen su sustento y el de los suyos, ayuden al progreso de la sociedad humana y alaben sin cesar la gloria de tu Nombre. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

BENDICIÓN DE UN BUSTO O PLACA

- Oremos: Dios todopoderoso, te rogamos que bendigas + esta placa (este busto), que recuerda a N., y concédenos la gracia de tener siempre presente que nuestro deber primordial como argentinos es servir gozosa y valerosamente al bien común de nuestra familia argentina, y, así de este modo, sirviendo a los altos intereses de la patria en esta tierra, logremos llegar a la felicidad eterna del cielo que tú prometiste a tus fieles servidores. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

BENDICIÓN DE UNA BANDERA

I

Oremos: Oh Dios, que con la sangre preciosa de tu hijo, consagraste el estandarte santo de la cruz y quisiste que el árbol santo fuera para los fieles el signo de salvación: bendice + esta bandera que hoy te presentan tus hijos, y concede a cuantos confiesan a Jesucristo como su Dios y Señor, avanzar, guiados por esta bandera, por las sendas del Evangelio y para sus hermanos ejemplo de justicia, de fraternidad y de amor. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

II

Oremos: Oh Dios, que has hecho de todas las naciones un solo pueblo consagrado a ti; bendice + esta bandera que hoy te presentan tus hijos y haz que, bajo tu protección, obtengan con abundancia el bien de su patria y progresen también en el amor a todos los hombres. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén

BENDICIÓN DE UNA ESCUELA

- Señor nuestro Jesucristo, que mandaste a tus apóstoles implorar la Paz sobre las casas donde entrasen; te pedimos que bendigas + por nuestro ministerio, este lugar destinado a la educación de los niños (jóvenes); derrama sobre él la abundancia de tu bendición y de tu paz, llegue a él la salvación como llegó a la casa de Zaqueo cuando entraste en ella. Manda a tus ángeles que lo custodien y alejen de él todo poder del demonio.
Llena a sus maestros con el espíritu de ciencia, de sabiduría y de tu santo temor. Infunde a los alumnos tu gracia celestial para que reciban en su inteligencia, conserven en su corazón y pongan por obra cuanto para su bien se les enseña. Haz que todos los que vengan te agraden con el ejemplo de todas las virtudes, para que merezcan ser recibidos un día en la morada eterna de tu gloria. Te lo pedimos, Padre, por Jesucristo salvador del mundo, que siendo Dios vive y reina por los siglos de los siglos.
R. Amén.

BENDICIÓN DE UN VEHÍCULO

Dios todopoderoso, creador del cielo y la tierra, que, en tu gran sabiduría, encomendaste al hombre hacer cosas grandes y bellas, te pedimos por los que usen este vehículo: que recorran sus caminos con precaución y seguridad, eviten toda imprudencia peligrosa para otros, y, tano si viajan por placer o por necesidad, experimenten siempre la compañía de Cristo, que vive y reina contigo por los siglos de los siglos.
R. Amén.

Rocía con agua bendita

Y la bendición de Dios todopoderoso Padre +, Hijo y Espíritu Santo, descienda sobre vosotros.
R. Amén.

BENDICIÓN DE UNA BIBLIOTECA

- Señor, Dios nuestro, Tú que en distintas ocasiones y de muchas maneras te has revelado a los hombres y te has dignado entregarnos tu palabra en las Escrituras; atiende ahora nuestras súplicas. Te pedimos que bendigas + y santifiques esta biblioteca de modo que todos los que acudan a ésta, para cultivar las ciencias y las artes, se pongan al servicio de la sabiduría que dimana de tu Palabra Encarnada, y, debidamente instruidos en sana doctrina, trabajen asiduamente en la edificación de un mundo mas humano. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

 

BENDICIÓN DE UN PUENTE, CALLE O CARRETERA, DE UNA VÍA FÉRREA O DE UN AEROPUERTO

- Oremos: Oh Dios que estás cerca de todos los que viven entregados a tu servicio y velas con solicitud de padre por los que confían en Ti, dígnate preceder con tu bendición y acompañar con Tu presencia a todos los que transiten por (en) ella (él), para que con tu protección superen todas las dificultades de la vida, vean cumplidos sus deseos y lleguen felizmente al lugar de su destino Por Jesucristo nuestro Señor.

R. Amén.

BENDICIÓN DE UN HOSPITAL O CENTRO DE SALUD

- Bendito seas Dios y Padre Nuestro, que por medio de Tu Hijo, encomendaste al pueblo que camina en una vida nueva el cuidado y la solicitud de los enfermos; bendice y santifica este lugar, para que sea, por gracia del Espíritu Santo, una casa de bendición y una escuela de caridad; que bajo el influjo de Tu Gracia los médicos ejerzan sabiamente tu solicitud, que los que cuidan a los enfermos practiquen este servicio con solicitud, que los fieles vengan aquí para visitar a Cristo en la persona de sus hermanos, y los enfermos, confortados por el amor de todos, recuperen pronto la salud, se vean asistidos en su dolor y que puedan dar gracias por los cuidados de su amor. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

BENDICIÓN DE UN ENFERMO

I

Señor, Padre Santo, Dios todopoderoso y eterno, que con tu bendición levantas y fortaleces nuestra frágil condición, mira con bondad a este servidor tuyo N.; aparta de él la enfermedad y devuélvele la salud, para que, agradecido, bendiga tu Santo Nombre. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

II

Para un niño enfermo

Señor, Dios nuestro, cuyo Hijo Jesucristo recibió con afecto a los niños y los bendijo, extiende benigno tu mano protectora sobre este servidor tuyo, enfermo en su temprana edad; así, recobradas sus fuerzas, y devuelto en perfecta salud a tu Santa Iglesia y a sus padres, pueda darte gracias de corazón. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

III

Por un enfermo en peligro grave

Señor Jesucristo, Redentor de los hombres, que en tu pasión quisiste soportar nuestros sufrimientos y dolores, te pedimos por este hermano nuestro, que está enfermo; tú que lo has redimido, aviva en él la esperanza de su salvación y conforta su cuerpo y su alma. Tu que vives y reinas por los siglos de los siglos.
R. Amén.

IV

Por un enfermo agonizante

Padre Misericordioso, Tú que conoces hasta dónde llega la buena voluntad del hombre, Tú que estás siempre dispuesto a perdonar nuestras culpas, Tú que nunca niegas el perdón a los hijos que acuden a Ti, compadécete de tu hijo/a que se debate en agonía; te pedimos que, ungido con el óleo Santo y ayudado por la oración de nuestra fe se vea aliviado en su cuerpo y en su alma, obtenga el perdón de sus pecados y sienta la fortaleza de tu gracia . Por Jesucristo, tu Hijo, que venció a la muerte y nos abrió las puertas de la vida y contigo vive y reina por los siglos de los siglos.
R. Amén.

V

Bendición Papal "In artículo mortis"

Oremos: Señor Padre clementísimo y misericordioso, Dios de todo consuelo. Tú que no quieres que se pierda ninguno de cuantos creen en ti , conforme a la inmensidad de tu misericordia; mira propicio a tu siervo/a. Visítalo con tu gracia para que lo salves y concédele benignamente el perdón de todos sus pecados por los méritos de la Pasión y muerte de tu Hijo Jesucristo. Que cuando salga su alma de este cuerpo, encuentre en Ti su juez indulgente, y que, purificada de toda mancha en la Sangre de tu Hijo, merezca alcanzar los gozos eternos.
Y yo, haciendo uso del poder que me otorga la Sede Apostólica, y en nombre de nuestro Santo Padre el Papa, te concedo indulgencia plenaria y el perdón de todos tus pecados. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
R. Amén.

Que Dios todopoderoso y rico en misericordia, por la muerte y resurrección de Cristo te perdone todas las penas de esta vida, te abra las puertas del Paraíso y te lleve a los gozos eternos.
R. Amén.

BENDICIÓN DE UNA MUJER EMBARAZADA

I

(Antes del parto)
-Señor Dios, creador del género humano, cuyo Hijo, por obra del Espíritu Santo, quiso nacer de la Virgen María, para redimir y salvar a los hombres, librándolos de la deuda del antiguo pecado, atiende los deseos de esta hija tuya, que te suplica por el hijo que espera, y concédele un parto feliz; que su hijo se agregue a la comunidad de los fieles, te sirva en todo y alcance finalmente la vida eterna. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

II

(En caso de peligro)
- Dígnate, Señor, visitar esta habitación y aparta de ella y de tu sierva N. Todas las asechanzas del enemigo. Vengan a mora en ella tus santos ángeles que custodien a tu Sierva y a su hijo, y tu bendición + permanezca con ellos para siempre. Sálvalos, Dios omnipotente, y concédeles contemplar un día tu eterna gloria. Por Cristo nuestro Señor.
R. Amén.

III

(Después del parto)
- Oh Dios autor y protector de la vida humana que has concedido a esta hija tuya el gozo de la maternidad, dígnate aceptar nuestra alabanza y escucha con bondad lo que te pedimos: bendice y santifica a esta madre y a su hijo/a para que los guardes de todo mal, los acompañes siempre en el camino de esta vida y que, a su tiempo los acojas en la felicidad de tu reino. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

BENDICIÓN DE UN NIÑO RECIÉN NACIDO

- Señor nuestro Jesucristo, Hijo de Dios Vivo, que engendrado antes de todos los siglos, en el tiempo quisiste ser niño y amas la inocencia propia de la infancia; Tú, Señor, que abrazabas con amor a los niños que te presentaban, y los bendecías, cuida a este niño con tierna bendición y no permitas que la malicia pervierta su corazón. Concédele, Señor, que, creciendo en edad, sabiduría y gracia, siempre te agrade. Tu que siendo Dios vives y reinas con Dios Padre en la unidad del Espíritu Santo por todos los siglos de los siglos.
R. Amén.

BENDICIÓN DE UN ANCIANO

I

Dios omnipotente y eterno, en quien vivimos, nos movemos y existimos, te damos gracias y te bendecimos por que has dado a este servidor tuyo largos años de vida, junto con la perseverancia en la fe y en las buenas obras; concédeles ahora, Señor, que, confortado por el afecto de los hermanos, esté alegre en la salud, no se deprima en la enfermedad, y, reanimado con tu bendición, emplee en tu alabanza el tiempo de su ancianidad. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

II

La bendición + de Dios Todopoderoso, que a nadie abandona y que aún en la vejez y las canas guarda a sus hijos con solicitud de Padre, descienda sobre ti.
R. Amén

CULTO AL SANTÍSIMO SACRAMENTO

V. Bendito y alabado sea Jesús en el Santísimo Sacramento del altar.
R. Sea por siempre bendito y alabado.

O bien

V. Alabado y adorado sea el Santísimo Sacramento del altar.
R. Sea por siempre bendito y alabado Jesús Sacramentado.
    Padrenuestro...Ave María...Gloria...

O bien

V. Bendito y alabado sea el Santísimo Sacramento del altar.
R. Y la Virgen concebida sin mancha de pecado original desde el primer instante de su ser natural. Amén. Jesús, María y José.


Pange lingua

Pange lingua gloriosi
Corporis misterium.
Sanguinisque pretiosi,
quem in mundi pretium,
fructus ventris generosi
Rex effudit gentium

Nobis datus, nobis natus
ex intacta Virgine,
et in mundo conversatus,
sparso verbi semine,
sui moras incolatus
miro clausit ordine.

In supremæ nocte cenæ,
recumbens cum fratribus,
observata lege plene,
cibis in legalibus,
cibum turbæ duodenæ
se dat suis manibus.

Verbum caro, panem verum,
Verbo carnem efficit,
fitque sanguis Christi merum,
et si sensus deficit,
ad firmandum cor sincerum
sola fides sufficit.

Tantum ergo Sacramentum
veneremur cernui:
et antiquum documentum
novo cedat ritui:
præstet fides suplementum
sensum defectui.

Genitori Genitoque
laus et jubilatio,
salus, honor, virtus quoque
sit et benedictio:
procedenti ab utroque
compar sit laudatio.

R.Amen.

V. Panem de cælo præstitisti eis.
R. Omne delectamentum in se habentem.

Oremus:

Deus, qui nobis sub sacramento mirabili, passionis tuæ memoriam reliquisti, tribue quæsumus, ita nos Corporis et Sanguinis tui sacra mysteria venerari, ut redemtionis tuæ fructum in nobis iuiter sentiamus. Per Christum Dominum nostrum.
R. Amén

(Canta, lengua, el misterio del Cuerpo glorioso y de la Sangre preciosa que el Rey de las naciones, fruto de un vientre generoso, derramó como rescate del mundo.Nos fue dado, nos nació de una Virgen sin mancilla; y después de pasar su vida en el mundo, una vez esparcida la semilla de su palabra, terminó el tiempo de su destierro dando una admirable disposición.

En la noche de la última cena, recostado a la mesa con los hermanos, después de observar plenamente la ley sobre la comida legal, se da con sus propias manos como alimento para los Doce.

El Verbo hecho carne convierte con su palabra el pan verdadero en su Carne, y el vino puro se convierte en la Sangre de Cristo. Y aunque fallan los sentidos, basta la sola fe para confirmar al corazón recto

Postrémonos ante tan augusto sacramento
que el antiguo testamento ceda su puesto al nuevo rito,
y que la fe supla a la flaqueza de nuestros sentidos.

Alabanza, cantos de júbilo, salud, honor y poder
y bendición al Padre y al Hijo:
y al que procede de ambos igual homenaje tributemos.

R. Amén.


V. Nos diste, Señor, el pan del Cielo.
R. Que tiene en sí todo deleite.

Oremos:

Oh Dios, que nos dejaste el memorial de Tu pasión en este admirable sacramento, concédenos venerar de tal manera los sagrados misterios de tu Cuerpo y de tu Sangre, que podamos experimentar siempre en nosotros los frutos de tu redención. Tu que vives y reinas por los siglos de los siglos.

R. Amén.

 

Alabanzas en desagravio

I

Bendito sea Dios.
Bendito sea su santo Nombre.
Bendito sea Jesucristo, Dios y Hombre verdadero.
Bendito sea el Nombre de Jesús.
Bendito sea su Sacratísimo Corazón.
Bendita sea su Preciosísima Sangre.
Bendito sea Jesús en el Santísimo Sacramento del altar.
Bendito sea el Espíritu Santo Paráclito.
Bendita sea la Excelsa Madre de Dios, María Santísima.
Bendita sea su Santa e Inmaculada Concepción.
Bendita sea su gloriosa Asunción.
Bendito sea el nombre de María, Virgen y Madre.
Bendito sea San José, su castísimo Esposo.
Bendito sea Dios en sus Angeles y en sus Santos.

Amén.

 

II

 

Ant. Bendito sea el Nombre de Dios.

Bendito sea su Nombre que es único.
Bendito sea su Nombre que es admirable.
Bendito sea su Nombre que es: "el Altísimo"
Bendito sea su Nombre que es: "El que es".
Bendito sea su Nombre que es santo.
Bendito sea su Nombre que es temible.
Bendito sea su Nombre que es muy suave.
Bendito sea su Nombre que es: "el Señor del universo".
Bendito sea su Nombre, en el que está nuestro auxilio.
Bendito sea su Nombre que es nuestro Redentor.
Bendito sea su Nombre que es Abba, nuestro Padre.
Bendito sea su Nombre de misericordia.
Que su Nombre sea santificado en nuestros corazones.
Que su Nombre sea santificado en la Iglesia.
Que su Nombre sea santificado en todos los pueblos.


III

Ant. Bendito sea el Nombre de Jesús.

Bendito sea su Nombre: el Verbo de Dios.
Bendito sea su Nombre de Emmanuel: Dios con nosotros.
Bendito sea su Nombre de hijo de David.
Bendito sea su Nombre de Mesías.
Bendito sea su Nombre de Enviado.
Bendito sea su Nombre de Hijo de hombre.
Bendito sea el Nombre indicado a María y a José.
Bendito sea el Nombre que le fue dado a los ocho días después de su nacimiento.
Bendito sea su Nombre que nos promete la salvación.
Bendito sea su Nombre de Cordero de Dios.
Bendito sea su Nombre en el cual somos bautizados.
Bendiro sea su Nombre, inscrito en nuestra frente.
Bendito sea su Nombre que nos reúne y les hace presente en medio de nosotros.
Bendito sea su Nombre que levanta la persecución del mundo.
Bendito sea su Nombre por el cual nuestras súplicas son atendidas.
Bendito sea su Nombre que nos devuelve el céntuplo de lo que le hemos entregado.
Bendito sea su Nombre que es el Amén, el testigo fiel.


Preces por los sacerdotes

Corazón Sacratísimo de Jesús: para afirmar y aumentar nuestra fe, ¡danos sacerdotes santos !
Para aumentar nuestra esperanza, danos .....
Para hacer más fecunda nuestra caridad, danos .....
Para ayudarnos en la práctica de todas las virtudes, danos .....
Para que todas las gentes conozcan vuestra santa doctrina, danos .....
Para combatir el error, danos .....
Para mejorar las costumbres, danos .....
Para desterrar los vicios, danos .....
Para cristianizar la familia, danos .....
Para sostener vuestra Iglesia, danos .....
Para dirigir nuestras almas, danos .....
Para enseñar las riquezas de vuestro corazón Santísimo, danos.....
Para acelerar el reinado de vuestro Sagrado Corazón, danos .....


Oremos

¡Oh Dios!, que para gloria de vuestra majestad y salvación del linaje humano constituisteis a vuestro Unigénito Hijo, Sumo y eterno Sacerdote: haz, os rogamos, que aquellos a los cuales El escogió por ministros y dispensadores de sus misterios, sean hallados fieles en el cumplimiento de la misión que les está confiada. Por el mismo Cristo nuestro Señor.

R. Amén.