28 de enero
Santo Tomás de Aquino
presbítero y doctor de la Iglesia
Memoria
Amé a la Sabiduría más que a la salud y a la hermosura
Lectura del libro de la Sabiduría 7, 7-10. 15-16
Oré, y me fue dada la prudencia, supliqué, y descendió sobre mí el espíritu de la Sabiduría. La preferí a los cetros y a los tronos, y tuve por nada las
riquezas en comparación con ella. No la igualé a la piedra más preciosa, porque todo el oro, comparado con ella, es un poco de arena; y la plata, a su lado,
será considerada como barro.
La amé más que a la salud y a la hermosura, y la quise más que a la luz del día, porque su resplandor no tiene ocaso.
Que Dios me conceda hablar con inteligencia, y que mis pensamientos sean dignos de los dones recibidos, porque él mismo es el guía de la Sabiduría y el que
dirige a los sabios. En sus manos estamos nosotros y nuestras palabras, y también todo el saber y la destreza para obrar.
Palabra de Dios.
SALMO Sal 118, 9-14
R. Enséñame, Señor, tus preceptos.
¿Cómo un joven llevará una vida honesta?
Cumpliendo tus palabras. R.
Yo te busco de todo corazón:
no permitas que me aparte de tus mandamientos. R.
Conservo tu palabra en mi corazón,
para no pecar contra ti. R.
Tú eres bendito, Señor:
enséñame tus preceptos. R.
Yo proclamo con mis labios
todos los juicios de tu boca. R.
Me alegro de cumplir tus prescripciones,
más que de todas las riquezas. R.
ALELUIA Mt 23, 9b. 10b
No tienen sino un padre, el Padre celestial;
sólo tienen un Doctor, que es el Mesías.
EVANGELIO
Que el más grande de entre vosotros
se haga servidor de los otros
+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo
23, 8-12
Jesús dijo a sus discípulos:
«Ustedes, no se hagan llamar "maestro", porque no tienen más que un Maestro y
todos ustedes son hermanos. A nadie en el mundo llamen "padre", porque no tienen
sino uno, el Padre celestial. No se dejen llamar tampoco "doctores", porque sólo
tienen un Doctor, que es el Mesías.
Que el más grande de entre ustedes se haga servidor de los otros, porque el que se ensalza
será humillado, y el que se humilla será ensalzado.»
Palabra del Señor.